El Aeropuerto Internacional Santa María - Aracaju (SBAR) suele atraer visitantes en busca de las hermosas playas de la costa de Sergipe y las tradicionales fiestas juninas. Sin embargo, aquellos que piensan que la terminal de Santa María destaca únicamente por el turismo están equivocados. Además del tráfico regular de pasajeros, la unidad es reconocida por su excelencia en las actividades de logística offshore.

 

El aeropuerto atiende las demandas de helicópteros que transportan empleados a las plataformas petrolíferas de la costa de Sergipe y Alagoas, en la costa del Atlántico, impulsando un negocio importante para la economía del país. Este trabajo le ha valido a la unidad el Premio Peotram, en la categoría de Aeropuerto Terrestre, otorgado por Petrobras durante dos años consecutivos, en 2020 y 2021.

 

Santa María pasó a ser administrado por Aena Brasil en 2020, después de que la empresa ganara la subasta de concesiones de la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC) en 2019. Con la llegada de la empresa española, el objetivo es ampliar la infraestructura de la unidad, elevando el aeropuerto a estándares internacionales seguidos por instalaciones de todo el mundo.

 

El trabajo ya está en marcha. En 2022, el Aeropuerto Internacional Santa María - Aracaju recibió el Certificado Operacional de la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC), que certifica la capacidad operativa de la unidad y su funcionamiento de acuerdo con los parámetros de seguridad establecidos por los organismos de aviación civil nacionales e internacionales.